Un cirujano indio se arriesga a ser expulsado de la profesión, incluso a ser inculpado de un crimen, por haber permitido a su hijo de 15 años hacer una cesárea con la esperanza de hacerlo figurar en el libro Guiness de los récords (idiota).
Miembros de la Asociación médica india en Tamil Nadu (sur), cuentan que se quedaron boquiabiertos cuando el doctor K. Murugesan les hizo llegar un vídeo en el que aparecía su hijo, Dileepan Raj, con un escalpelo ante una parturienta.
"¿Cómo un médico puede transformar su maternidad en una carnicería en la que permite a su hijo, sin ninguna cualificación, dirigir una operación quirúrgica?", protestó ante la AFP el ministro local de Sanidad, K.K. Ramachandran. "He ordenado una investigación y se tomarán medidas severas", agregó.
ras la cesárea efectuada por el adolescente, el bebé nació vivo, pero las autoridades deberán dirigirse a la madre por si quiere presentar una demanda.
Al difundir el vídeo a sus colegas, el doctor Murugesan no se arrepiente de su decisión, convencido de que su hijo merece entrar por su hazaña en el libro Guiness de los récords, relató la secretaria de la Asociación de médicos de Tamil Nadu.
Pero la cesárea ilegal bien podría acarrera una expulsión de la profesión del cirujano. Él y su hijo podrían ser igualmente inculpados penalmente por daños inflingidos a la paciente, indicaron fuentes médicas.
El doctor Murugesan declaró a la prensa que no había hecho nada malo y que su hijo ya había operado en el pasado.
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